Aspectos más relevantes del estudio ambiental del parque solar
Estudio ambiental llevado a cabo por una empresa externa y presentado a los diferentes organismos competentes de la Generalitat de Catalunya para su estudio.
Desde abril de 2024
Osona
De superficie prevista
Con una potencia pico de 2,2 MWp
Equivalente al consumo de 1.280 hogares
Lo que emiten 289 coches de combustión/año
Entorno ‘artificializado’
Paisaje con impacto de la acción humana
La ubicación de la planta se sitúa en un paisaje antropizado, es decir, en el que la acción humana ya tiene un impacto importante y, por tanto, queda lejos de los espacios naturales propios del Montseny.
En un entorno 'artificializado'
El parque solar se ha proyectado en un entorno ‘artificializado’, donde a lo largo de las últimas décadas la actividad agrícola ha perdido peso, dejando espacio al desarrollo y crecimiento del tejido urbano y residencial de los núcleos municipales de Balenyà y Centelles.
Cercano al punto de conexión con red
El proyecto de parque está ubicado en terrenos cercanos a las infraestructuras de la conexión eléctrica, proximidad que ayuda a minimizando el impacto de la instalación porque puede aprovechar la red existente para verter la energía verde generada por la instalación. Además, esta circunstancia permite la continuidad de la matriz rural con la actividad humana, sin que suponga una descompensación de la estructura agrícola y, por tanto, del propio paisaje.
Ubicación de conectividad muy baja
El índice de conectividad terrestre general es muy bajo, con valores de entre 2 y 3 sobre 14, y de rebote su impacto en los desplazamientos de la fauna autóctona.
Energía verde que convive con el entorno
Se plantarán árboles de pantalla visual
Aunque su ubicación está prevista en una zona ‘artificializada’, el proyecto tiene previsto llevar a cabo un apantallamiento vegetal arbustivo del margen oeste de la planta, para reducir el posible impacto visual de aquellos observadores situados en la Carretera de Ribes.
Bajo las placas, un terreno verde
Las placas solares convivirán con un suelo verde, lo que hará que la integración del parque en su entorno natural sea mayor. Para ello, está previsto que se lleve a cabo una siembra herbácea. El crecimiento de la flora autóctona bajo las placas contribuye a la aparición de polinizadores.
Una valla cinegética para dejar paso a la pequeña y mediana fauna
Alrededor de la instalación, está previsto poner una valla cinegética, que permite que por sus agujeros y la parte inferior pueda circular libremente la pequeña y mediana fauna de la zona.
Estudio ambiental llevado a cabo por una empresa externa y presentado a los diferentes organismos competentes de la Generalitat de Catalunya para su estudio.
El índice de biodiversidad, es un valor cualitativo que tiene en cuenta ocho tipologías de índice de flora, fauna y hábitats de interés por la conservación, y determina la cantidad y valor de las diferentes especies que se pueden encontrar en un ecosistema en concreto. Por tanto, cuanto más especies diferentes existan en un lugar, más elevado será este índice.
Las líneas negras determinan los límites de la planta fotovoltaica. En el caso del proyecto de Congost, la planta se ubicará en una zona con diferentes clasificaciones del propio índice, donde predominan las zonas catalogadas como baja o baja-moderada (rojo – amarillo).
La implementación de una cubierta vegetal al suelo, formada por plantas autóctonas, que favorezca la llegada de insectos polinizadores, contribuirá a fomentar la biodiversidad de la zona.
El índice de conectividad ecológica es un valor numérico, que comprende del 1 al 14, que determina, según la medida y la distancia de los diferentes hábitats próximos, la calidad del medio natural para permitir el movimiento y la dispersión de los organismos que viven. Por lo tanto, un medio con elevada capacidad de movimiento de especies a hábitats afines tendrá una puntuación próxima a 14.
Las líneas negras determinan los límites de la planta fotovoltaica. En el caso del proyecto de Congost, la planta se ubicará en una zona de conectividad faunística muy baja (2 sobre 14).
Con la implementación de la cubierta vegetal al suelo y la instalación de un cierre cinético y ecológico se atraerá y se permitirá el paso de fauna pequeña y media. Esto permitirá recuperar la presencia de animales y, de este modo, volver a un estado similar al que existía previo en la actividad humana, con un entorno más naturalizado.
El índice de sensibilidad ambiental es el resultado de la aplicación del modelo de zonificación ambiental para la implantación de energías renovables del Ministerio para la Transición Ecológica. Se trata de un indicador que puede tomar cinco valores cualitativos de sensibilidad: baja, moderada, alta, muy alta y máxima. Desde el Ministerio se recomienda que este tipo de proyectos se sitúen en zonas de sensibilidad baja o moderada. Este índice puede consultarse al Geoportal (Tabla de Contenidos>Calidad y Evaluación Ambiental>Evaluación Ambiental), herramienta creada por el propio Ministerio.
Las líneas negras determinan los límites de la planta fotovoltaica. En el caso del proyecto del Congost, la planta se ubicará en una zona de sensibilidad ambiental baja.